jueves, enero 25, 2007

SOBRE LOS MUNDOS POSIBLES
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___La literatura está en crisis desde hace varias décadas. Los lectores son errabundos testigos de las nuevas tendencias hegemónicas literarias. Las tendencias hegemónicas están condicionadas mayormente por el cine, y al parecer no hay nada que pueda hacerse al respecto. La imagen se sobreimpone al texto porque el acceso resulta más fácil y más barato. Es quizá un cambio de actitud popular manifiesta cuyo desenvolvimiento no puede calibrarse todavía. El cine se ha convertido en un desfogue ciudadano. Los titulares de las secciones culturales de nuestros diarios siguen enfocándose en el posicionamiento de los directores mexicanos en el mercado fílmico internacional: el Óscar, los Golden Globes, etcétera.
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___Esto es benéfico, indudablemente, con tal que no se confundan los géneros y teniendo en mente que la literatura exige nuevas exploraciones. Pero dichas exploraciones parecieran estar estancadas entre un experimentalismo ridículo y un apego suicida a los modelos prevalecientes. El escritor acude al cine y tiende a adoptar los códigos visuales que le deslumbran como esquemas predominantes en su percepción literaria. Se adapta. El cine amolda la imaginación colectiva a sus propios terrenos y define emisión y percepción textual. Una ambivalencia posmoderna inevitable.
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___Pero el cine es una galería de códigos distintos. La literatura juega con la imaginación del lector, el cine apabulla esa imaginación aunque, no se puede negar, también la alimenta, la sobredirige. El cine tiende a imponer sus ritmos y espacios.
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___El escritor de ficciones tiene frente a sí dos alternativas: o se supedita a surtir al género cinematográfico de ideas novedosas o continúa, creando mundos como los que hicieran Rulfo, Flaubert o Revueltas, lugares imposibles de recrear en una cinta. El espacio contra el tiempo. La dualidad de la existencia.
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1 comentario:

Sabes que conmigo no dijo...

vivo en un mundo posible
en el que soy guera