domingo, marzo 18, 2007

TRADICIONES Y PERTENENCIA
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___La fiesta comenzó como a las 9:30. Hay un enorme tejaván al aire libre, mesas, sillas, pacas de alfalfa y alguna silla de montar como pieza de decoración. Sorprende ver a la mayoría de los invitados con indumentaria vaquera: jeans, botas, sombrero texano, hebillas brillantes y gruesos cinturones. El clima es inusualmente agradable. Un grupo norteño ameniza el baile que arranca con el ritual que celebra los quince años del festejado: el paseillo se hace a caballo alrededor de sitio. Hay cerveza, música y gente que baila "Ay mi yaquecita" y piezas así.
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___Aunque una parte de los asistentes provienen de un pueblo ganadero cercano, la mayor parte viven en la ciudad aunque siguen vistiéndose como cuando vivían en el pueblo, como sus padres y sus abuelos vinculados a la ganadería y la agricultura. Nostalgia. Ahora en pueblos como el suyo viven unas cuantas decenas de personas, reductos del recuerdo a donde regresan los descendientes a pasar los días de asueto, a añorar el pasado.
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___Pero nada de esa vida pasada es autóctona o "propia". Toda la parafernalia de "los pueblos" ha sido importada desde el principio: el sombrero tejano, los jeans, las botas y también la música. Pero la gente quiere pensar que sus costumbres y sus rituales nacieron "con ellos".
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___El asunto es la pertenencia. Todos deseamos pertenecer a algo, a un grupo, o una cultura, especialmente cuando somos víctimas del desarraigo, cuando se tiene que emigrar por una u otra razón. Entonces el amor por lo que se considera "propio" tiende a exagerarse, a reeditarse, a recargarse, a sublimarse. Es entonces que los rasgos culturales considerados "propios", las tradiciones y costumbres, se adulteran y sigilosamente van cambiando hasta transformarse en una parodia, un simulacro de lo original, una copia.
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___Lo que tendemos a ignorar es que "el original" también cambia, se mimetiza con los nuevos aires, con la transculturación, con el globalismo, y la parodia se distancia de tal forma, que en determinado momento pierde el vínculo con lo que proponía simular. El simulacro se extravía y toma su propio camino, entonces se convierte en un nuevo "original", uno adulterado como sus antecesores. Como se adulterara desde su génesis la vida de "los pueblos de Sonora", que absorbieron la minería, los sistemas de riego, la ganadería, las creencias, esas importaciones extranjeras y los hicieron "suyos".
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___No piensen que por pensar en esto no me divierto en esas celebraciones. Al contrario, me divierte ver cómo creamos nuestra propia mitología, nuestros autoengaños, nuestras nuevas adoraciones.
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1 comentario:

Manuel dijo...

Y al final solo nos queda una hebilla o un sombrero de nuestro pasado campirano

Saludos primaverales