martes, septiembre 26, 2006

LOS INFACULTADOS
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___A Mario Alberto Lamadrid Romero
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___Ellos escribían en unas pequeñas máquinas, escribían e iban imprimiendo al mismo tiempo unas hojitas perforadas como en sistema Braile. Al menos eso era lo único que podía sacar como conclusión. No sabía sino que así se comunicaban porque eran incapaces de escuchar, de ver y de hablar. Balbuceaban y sus gestos y su modo de comportarse era despreciable, incivilizado. Los veía desde un rincón. En ocasiones podían percatarse de que yo estaba ahí, pero generalmente ellos no podían percibirme porque yo actuaba con cautela. Me molestaba ver la manera en que se tocaban unos a otros para iniciar contacto. Luego sacaban sus maquinitas semejantes a unas calculadoras, plateadas y planas, y montado el rollito de papel que iban imprimiendo.
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___Estuve con ellos por más de dos años, lidiándolos, alimentándolos y llevandolos a la escuela Mako, donde los maestros japoneses les enseñaban cosas especiales, como manejar las maquinitas, por ejemplo, y a aprender a decifrar eso que yo consideré al principio un sistema Braile.
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___Cuando partí de ahí la última vez, sabía que no regresaría al lugar. Sentí conmiseración por ellos. Me entristecía saber que sus expectativas de vida eran limitadas y que siempre dependerían de sus maquinitas para comunicarse. <>, me decía el Predicador y continuaba con sus tareas sin inmutarse, porque lo terrible que significaba la vida al lado de aquellas criaturas apenas podía ignorarse o pretender ignorarse. Antes, simplemente se les dejaba solos en el bosque y se les reportaba perdidos. Pobres ciegos. Se sabe que no hubo sobrevivientes de épocas anteriores porque el bosque esta vedado para los que son verdaderamente libres. Ahora las cosas han cambiado.
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___Ahora que el Centro ha cerrado el acceso a nuevos pacientes, mamá ha dicho que podríamos ir a visitarlo y que desearía vivir ahí una temporada, aunque fuera breve. Por sus influencias podría recluirse ahí sin problemas, pero me escandalizó la posibilidad de verla a ella comunicándose con los que quedan por medio de sus maquinitas. No lo soportaría.
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3 comentarios:

Omar Bravo dijo...

Maese nacho, aquí leyéndolo también.
Y no pasó nada. Y si pasó pues, pero no lo que hubiera querido, o ya ni sé.
Quesque muchas gracias por la visita y que el año que entra esperamos contar con su participación, y que no dude en probar las tortas de tamal, nuestra delicia gastronómica de méxico para el mundo, etc.

Ni hablar, así es esto, no queda más que seguir de necio, escribiendo.
¿O usté que cree?

saludos.

ismael dijo...

Maese.... aquí reportando desde la deriva, ninguna novedad, pero si gusta llamar con todo gusto, antes de las 10 ...
un saludo..

Bernardo Ruiz dijo...

Estimado Nacho:

Recibí tu recado para conocer tu blog.
Desgraciadamente cerramos hace una semanas el número para edición. Pero ha sido un gusto leerte.
Saludos y éxito
BR