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ALEGORÍAS
Me han pedido que opine sobre las críticas que manan del vertedero cretinoso del Charquito acerca de los textos que han aparecido en una publicación de nombre La Línea. Esta solicitud me introduce en uno de mis bosques favoritos: el bosque lluvioso del desierto. Voy a abundar sobre el tema.
El bosque lluvioso del desierto es un sitio que muy pocos mortales (me refiero a los mortales vivos porque muchos mortales ya fallecidos -como Verne- ni siquiera imaginaron este ambiente) han visitado, en parte, porque es una categoría geoparentética que apenas hoy he creado. En principio aseguro que quienes han conocido ese lugar son individuos que apenas (¿no hay un sinónimo de apenas?) estoy por crear, y porque ese reino me pertence por entero y quienes ahí habiten serán propiedad de mi copyright personal (si ustedes han empezado a elucubrar con esta idea, sugiero que se esperen, o bien, que creen su propia historia y salgan inmediatamente de mi bosque lluvioso del desierto).
Siguiendo este orden de ideas, observo que quienes prometieron que yo recibiría copias de La Línea (recuerden que yo nací a escasos 50 metros de la línea divisoria México-EU, lo que me convierte en un "liniero" por antonomasia) eludieron su promesa. (También estoy esperando que la Hoja Frugal (viene de otra línea) llegue a mi domicilio sin que eso ocurra).
Lo confieso: no conozco La Línea. De sus autoras, conozco a Amaranta Caballero gracias a su blog (que visito con frecuencia necia) y a un delicioso intercambio epistolar que juzgo por su honestidad. A Ektor Henrique Martínez, crítico autor de El Charquito, lo leo a pesar de su poca consideración por el concepto horas/hombre, y lo conozco merced a un intercambio epistolar de tres renglones.
La crítica de Martínez a las autoras de La Línea me parece excesiva en tanto que yo no utilizaría una retroexcavadora para hacer los hoyitos con los que se juega a las canicas al juego de los hoyitos, valga la redundancia. Por ora parte, la respuesta de las autoras de La Línea (de algunas) a las críticas chaquenses me parece natural, si bien ausente de humor y atrincherada en una poco efectiva Línea Maginot.
Tons qué: facilísimo: el bosque lluvioso del desierto es eso: desierto relleno de puntos y seguidos: las formas anteceden a las ideas: las vanguardias lamentan lo sucedido (no era su intención): el bosque lluvioso desaparece: el desierto permanece.
¿Qué horas son?
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