LA RETAGUARDIA DE LA VANGUARDIA

En respuesta al post sobre el concepto “vanguardia” donde David M. me menciona, preciso lo siguiente. Raras veces menciono blogs o autores de blogs, lo cual no es una regla definitiva ni nada por el estilo. No los menciono porque los interlectores ya saben a quien me estoy refiriendo o a quien estoy aludiendo.

Además, como es el caso, no escribo pensando en una persona en particular aunque determinada persona esté involucrada en el diálogo. Por ejemplo, la cuestión de catalogar como vanguardista al blog (en el estricto sentido que le dí en mi post de anoche) tiene como propósito plantear una idea a los blogueros de reciente ingreso que quizá no han reflexionado el contexto de este medio. También intersecta una serie de opiniones de otros blogueros, entre ellos la Bitácora de Paso de David, sobre la trascendencia-intrascendencia de este medio de comunicación-publicación express. A otro sector de blogueros estas disertaciones no les preocupan ni ocupan en lo más mínimo.

No entiendo la referencia de David al blog (o a los blogueros) como un elemento de retaguardia en el contexto de la guerra. Es análogo a alegar que los impresores del renacimiento estaban a la retaguardia en relación a la amenaza turca del momento porque poco o nada podían hacer frente a ella. Sorry, pero la verdad no lo sitúo.

Por otro lado, en mi blog no tengo links. La razón es muy simple: tendría que poner la mayor parte del directorio que aparece en el blog de Rafa S. y no le veo caso. No digo que los leo todos pero sí una buena parte. Además tengo que recurrir a esa ventana del TJBF porque ahí aparecen los nuevos blogs, otros links foráneos, etc. Por mi parte no deseo tener blogs “favoritos” y menos hacer un listón interminable de blogs más nuevos blogs más nuevos blogs que voy a tener que estar actualizando. Esa labor la hace desinteresadamente nuestro amigo Rafa.

Tengo amigos blogueros a quienes sin conocer personalmente estimo y con quienes dialogo en vivo y en directo mediante el chat y el e-mail. Ahí puedo hablar de cosas públicas y también privadas que no deseo publicar. Más “diálogo directo” sale sobrando.

No creo que sea una regla el tener que estar citando blogs y dando links a cada post que hacemos, excepto cuando el caso lo amerite. Cada bloguero tiene el derecho de hacerlo o no, es una cuestión de gustos y de estilo. Mi amiga empírica, por ejemplo, me envió una excelente fotografía de un indio seri a través de su blog y puso "para I.M." Good, está bien, yo soy IM, que bien y los que se interesen y hayan leído mis posts saben de que se trata ese asunto. Así es la cosa.

El otro día hice una referencia las bombas “inteligentes” de EU en cierto contexto. Heriberto Yépez dijo que los que piensan que hay bombas inteligentes son estúpidos. Yo dije que cualquier bomba era más inteligente que Bush, (algo así) y no me considero estúpido. Luego entonces no voy a dedicarle un post a HY para responder a ese diálogo subrepticio que es parte del “juego” del blog. (-Sí serás... HB, aquí ya lo estás haciendo- “Bueno, dije que lo haría si el caso lo amerita”). “Tú me lees, gracias, yo también, nos vemos en el siguiente post”, podríamos leer entre líneas..

Adicionalmente, tengo mis reservas acerca de la opinión de María Moliner sobre el origen –catalán- del concepto vanguardia. Pero sobre ese asunto escribiré un post aparte más tarde.