SI FUERA SADAM HUSSEIN.

Hoy por la mañana (noche en México) hablé con Sadam Hussein. Habían transcurrido 6 horas desde el ultimátum de Bush para detonar la guerra. 48 horas, dijo el texano frente a las cámaras del mundo.

El hombre se miraría tranquilo. Habíamos acordado que las preguntas se harían por escrito y que las respuestas serían traducidas por un equipo de traducción iraquí. La reunión con Sadam seria breve y protocolaria. Un par de fotos si acaso y eso sería todo. Fin de la entrevista.

Bien. El hombre se miraba tranquilo. Las preguntas por escrito regresaron acompañadas por respuestas cotejadas y revisadas por un grupo de especialistas iraquí. La reunión con Sadam fue breve y menos que protocolaria. Una foto solamente y ya. Fin de la entrevista.

¿Qué haría usted si fuera Sadam Hussein frente al ultimátum de Bush?, era la primera pregunta para Sadam.

Sadam respondió lo siguiente:

Si fuera Sadam Hussein no le daría este trato que le doy ahora a usted. Reuniría a periodistas de todo el mundo para anunciarles que Sadam Hussein se rendirá. Que Sadam Hussein se rendirá si EU tiene la disposición para compartir la paz. La única condición es que el ejército de los EU y sus aliados se retire de la zona y que un país ajeno a la guerra como Francia conceda al gobernante de esta nación el derecho de asilo político.

Si fuera Sadam Hussein, continuó, ordenaría ahora mismo que todos los iraquíes, mujeres y hombres, ancianos y niños, se preparasen a morir frente a un invasor que nada tiene que arriesgar en estas latitudes.

Si fuera Sadam Hussein, insistía mi entrevistado, viajaría al Caribe para nadar en una playa infestada de tiburones e insistitía en que el miedo es un perfume venenoso. Si fuera Sadam Hussein, amigo periodista, no concediera ninguna enrtevista.